Entradas

Mostrando entradas de abril, 2017

EL PAPA DEL “DESCONCIERTO”

Cuando Francisco salió al balcón del Vaticano, el trece de marzo de dos mil trece, y pidió que rezaran por él, y además lo dijo en español,  imagino que varios millones de personas, como yo, nos sentimos interpelados directamente. Han pasado poco más de cuatro años y la palabra del Papa siempre es generosa. Conmueve. Al mismo tiempo que genera resistencia, también complace. Sus signos han sido muy poderosos. Aire fresco entró en la iglesia. Y también hay quienes desean cerrar todas las ventanas. En el libro “Francisco, palabra profética y misión”, de reciente circulación en Chile, el teólogo español José María Castillo destaca el “evangelio desconcertante” del Papa Francisco. Sostiene que su palabra y su acción generan un “notable desconcierto”, que con frecuencia, “se traduce en desconfianza, distanciamiento y, en no pocos casos, un fuerte rechazo”. Si en algo se distingue el Papa Francisco, comenta Castillo, es en su sencillez de vida, su cercanía a los más pobres, enfermos y an

¿DE QUÉ NOS SALVÓ CRISTO?

Recuerdo que una vez, mientras veíamos una película sobre la Pasión del Señor en Semana Santa, mi hija Ana María me preguntó de pronto: ¿De qué nos vino a salvar Jesús? Me sentí muy incómodo. Ella no tenía formación religiosa. Seguramente había oído que nos salvaba del pecado. Muy difícil de comprender para ella, y nada satisfactorio para mí, debido al moralismo usual, fácil y frecuente. Lo primero que me vino a la cabeza fue decirle que nos salva del sinsentido en la vida. Aparentemente no le cayó mal. Pues remitía a un ámbito más profundo, aunque bastante vago. Reflexionando después, me di cuenta de que la dirección de mi respuesta era correcta. Pero sólo como indicación de una vía en demanda de contenidos. Cuando se habla corrientemente de “salvación”, se entiende el término como salvarse de un peligro, de una inundación o de un incendio. Pero no lo hace así el discurso religioso. En efecto, el origen de la religión como fenómeno histórico, se encuentra en el intento humano por

HISTORIA DE KAROLINE MEYER

Reproducimos a continuación una conversación sostenida por Rodrigo Silva con la religiosa y misionera alemana Karoline Mayer, originalmente escrita para la Campaña Cuaresma de Fraternidad de este año, que organiza la iglesia católica desde 1982. Por el valor de su testimonio nos parece relevante compartirla con ustedes. MISIONERA DEL AMOR. ESE ES EL SECRETO Esta es la breve historia de una religiosa alemana que quizá haya descubierto su vocación a los cuatro  años de vida, pero que desde los once se convenció. Nacida en plena segunda guerra, con el paso de los años consolidó sus convicciones de misionera. Aun cuando se preparó para viajar a India o China, su destino fue el Chile de los años sesenta. Tenía la necesidad hasta hoy de seguir las enseñanzas de Jesús. De vivir y compartir con los más débiles y postergados de la sociedad. Su obra ha trascendido generaciones y estratos sociales. Educación, salud, trabajo para jóvenes, asistencia para atender la discapacidad, gente en s

LA RESURRECCIÓN DE JESUCRISTO

Confiamos en que todos los miércoles por la mañana, cada uno de ustedes recibirá una nueva entrada de este blog. Hoy estamos centrados en la resurrección de Jesucristo, ese misterio que constituye el eje central de nuestra fe. Con diversas miradas, nos parece que los textos ayudan a una reflexión mayor. Concluimos esta entrega con un generoso texto de Ernesto Moreno, quien con su esposa María Angélica son los nuevos integrantes de nuestra Comunidad. Para ellos nuestro agradecimiento y también para ustedes, por abrirnos un espacio de encuentro. AL MODO DE JESÚS 89 años, el único hermano hombre de mi mamá, vive en una población. Me llamó hace un tiempo para venirse a nuestra casa en Paine, a pasar unos días de descanso. La Juanita que trabaja con nosotros, me pregunta y ¿sus hijos? Juani, le digo, es religioso. Una semana de total relajo para él que vive de una manera muy elemental, de compartir nuestra vida e involucrarse en nuestras actividades, debates y conversas, traguito en

¿COMO VIVIR HOY LA CRUZ DE CRISTO?

El teólogo Leonardo Boff en su libro Pasión de Cristo y sufrimiento humano propone una profunda reflexión cuyo eje central aquí trato de reproducir. Nos dice que lo primero que tenemos que hacer, es ampliar nuestro concepto de la cruz y de la muerte. La muerte no es sólo el último momento de la vida, sino que la vida entera va muriendo, limitándose  hasta sucumbir en el último instante. Por eso, preguntarse cómo murió Cristo equivale a preguntase cómo vivió, cómo enfrentó los conflictos de su existencia, cómo aceptó la trayectoria de su vida que acaba con la muerte. Aceptó la muerte asumiendo todo lo que llevaba consigo la vida, con sus alegrías y tristezas y, sobre todo, con los conflictos y enfrentamientos que se derivaban de su mensaje y de su manera de vivir. Por ello, yo creo que es muy positivo y reconfortante otorgar sentido a nuestra muerte de acuerdo al sentido que ha tenido nuestra vida. El arte de morir se desprende del arte de vivir. Esta comprensión más amplia de la v

SEMANA SANTA. SIEMPRE DIFERENTE

Después de leer a José Antonio Pagola, Jesús aproximación histórica, Jesucristo tiene para mí una nueva dimensión, humana, cercana. Un hombre de carne y hueso. De allí en más la Semana Santa cambió de carácter. Un hombre fue entregado y crucificado. Por nosotros. Me impacta muchísimo cuando está en la cruz, agonizando y clama "Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?" , como lo han de decir miles y miles de creyentes que en una situación de extrema aflicción,  ven en Dios su última oportunidad. Me sobrecoge que el hijo de Dios sea tan humano como cualquiera de nosotros. Por eso la Semana Santa la vivo de una forma diferente. Comprendo tan bien cuando el Papa Francisco en su homilía de este Domingo de Ramos dice que  “Él está presente en muchos de nuestros hermanos y hermanas que hoy, hoy sufren como Él, sufren a causa de un trabajo esclavo, sufren por los dramas familiares, por las enfermedades... Sufren a causa de la guerra y el terrorismo, por culpa de los intereses

EL EVANGELIO EN EL MUNDO DE HOY

A diferencia de lo que ocurría un par de generaciones atrás, en la mayoría de los países de tradición cristiana de hoy, no resulta natural u obvio decirse cristiano. El régimen llamado de cristiandad ya no es plenamente vigente. Los códigos culturales en los que se formuló la fe,muchos de los dogmas que se nos transmitieron, hoy no encuentran resonancia. La moral tradicional no parece muy convincente, pues no siempre apunta a los actuales desafíos humanos. Los ritos de la Iglesia han dejado de ser significativos, y ella misma como institución se devalúa, decrece su credibilidad ante la sociedad. No obstante y gracias a Dios, son muchos los cristianos, sacerdotes, religiosas, laicos e incluso obispos,   que buscan vivir en coherencia con una fe que va más allá de ese catolicismo tradicional. Adecuarse al espíritu del Evangelio Los cristianos nos hallamos en franca minoría y nos preocupa la pregunta por nuestra identidad. Creemos que en nuestra búsqueda, no deberíamos preocuparnos

NOCHE DE COMUNIDAD

Este lunes vivimos una reunión especial. Era la primera vez que estábamos en ese departamento acogedor, luminoso, ordenado, con muchos libros y diferentes objetos y adornos que representaban parte de la esencia de los dueños de casa. Una hermosa mesa para doce personas, ordenada, platos blancos, fuentes de ensaladas, con predominio de los rojos (tomates) y verdes (lechugas y paltas), copas para vino. Mantel blanco. Todo pulcro, todo ordenado, esperando a los nuevos comensales, nuestra comunidad. Ayer solo faltó una persona, una mujer que habitualmente es la anfitriona en su casa de Vitacura. Esta vez estaba  centrada en el regreso de uno de sus hijos, que con todo y familia llegaba de Italia luego de año y medio o dos en sus estudios de doctorado. Razón más que justificada para su ausencia. El encuentro comienza con la apertura de los vinos jugos o aguas que irán a acompañar una conversación que con el paso de los minutos adquiere más densidad. Al comienzo, un Padre Nuestro.  Luego